Como ya os dije en el post en el que hice mi presentación, uno de mis hobbies favoritos tiene que ver con el mundo del motor, me encanta todo lo relacionado con los coches, pero aunque resulte extraño, odio las carreras y la formula 1. Se podría decir que mi pasión por el mundo del motor es más bien de manera amateur.
Bueno, al grano, como bien dice el título del post, vengo a hablaros de los vehículos híbridos en comparación con los vehículos de gasolina. Por supuesto todo esto lo escribo a título personal y lo hago a través de mi experiencia al tener un coche híbrido (un Toyota Auris que me lo proporciona la empresa en la que trabajo) y un coche diesel personal (un golf de más de quince años al que le tengo mucho cariño).
Empezaré hablando por mi coche personal, se trata de un Volkswagen golf IV de 1.6 diesel, le tengo mucho cariño porque me lo regaló mi madre hace más de quince años, y aunque lo he mimado muchísimo desde primer día, el paso del tiempo también afecta a los coches y cada vez se nota que está mas "viejito". A pesar de la manía que le tiene la gente, sobre todo últimamente, a los coches diesel, he de decir que al ser un 1.6 no contamina en exceso, aunque por supuesto que lo hace mucho más que un coche híbrido, pero no de manera exagerada. El coche para ser un 1.6 con 105 caballos la verdad es que tiene mucha fuerza, diría que más que el híbrido que es un 1.8. Aunque supongo que eso es más bien una impresión mía.
Como gran parte de mi vida se lo dedico al trabajo y para ello tengo el coche de la empresa, ahora no hago tantos kilómetros como hacía antes en mi coche personal, por lo que el ahorro en gasoil, que es de lo que se trata al adquirir un diesel, no es tan llamativo como hace unos años cuando si que le hacía mucha rueda a este coche.
Otro tema a destacar está en las revisiones, siempre hemos oido que los recambios y la mano de obra en un taller para un vehículos diesel es más cara que para los vehículos gasolina, pero en cambio esa fama no tiene nada que ver con los híbridos, ya que los híbridos al ser coches "especiales" necesiten de unas revisiones más exhaustivas que un coche convencional y por tanto son bastante más caras.
En cuanto al coche híbrido, ahora mismo solo lo utilizo para trabajar, hago unos 600 kilómetros a la semana y me están consumiendo unos 25€ de gasolina, que podrían ser muchísimos menos si el trayecto lo hiciera por ciudad, pero como gran parte del recorrido es por autopista, tengo que tirar del motor de gasolina si o si.
Como os vengo diciendo, este tipo de vehículo es perfecto para la ciudad y las distancias cortas, por eso mismo es por lo que los taxistas lo están utilizando tanto, apenas gastan gasolina, se conducen con suma facilidad ya que la gran mayoría de ellos son automáticos y encima, son muy silenciosos.
La gran pega es el coste de la batería híbrida, que por normal general se suele cambiar cada 120.000 kilómetros y su precio ronda los 2.000€. Por suerte, muchas casas de coches tienen seguros especiales para las baterías híbridas, y por un módico precio anual te ahorras muchas sorpresas en el futuro.
Por cierto, aunque al principio me costo un poco habituarme, he de decir que es una maravilla que el coche sea automático. Te olvidas por completo del embrague y de tener que cambiar marchas, y de lo único que tienes que preocupar es de acelerar, frenar y disfrutar de la carretera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario